CONTROL DE APLICACIÓN DE DOSIS VARIABLE
Modifique la dosificación con mapas de prescripción para gestionar mejor las variaciones del campo. La variabilidad puede depender de diversos factores, como las propiedades del suelo, la topografía, el historial de cultivos y el uso de la explotación. El GPS comunica su posición al controlador de dosis a medida que el equipo de aplicación recorre las distintas zonas del campo, lo que le permite variar la dosificación por área. En lugar de limitarse a aplicar un flujo constante de semillas, es posible aumentar la siembra en zonas bien irrigadas o muy fértiles para maximizar el rendimiento y reducirla en áreas con menor fertilidad o irrigación. También puede adaptar la aplicación de productos químicos y fertilizantes a cada área, lo que reduce los costes de insumos y mejora los resultados.